CINE DE ANIMACIÓN

Megamind: un supervillano con corazón de héroe

La factoría de animación  Dreamworks (padres de Madagascar, Kung fu Panda o Shrek) trae, de la mano de Tom McGrath, Megamind. Una película apta para toda la familia, con toques de humor que encantará a pequeños y mayores. Es un nuevo enfoque sobre la lucha del bien contra el mal, o en este caso, del mal contra el bien, ya que cuando el super-villano Megamind derrota a su rival Metroman, el mundo debería estar bajo su poder. Sin embargo, nuestro protagonista se da cuenta de que la vida sin un contrincante a su altura carece de interés alguno, ya que no tiene motivación para continuar siendo malvado. De esta forma, crea un nuevo héroe, Titán, que se convertirá en más villano de lo que lo era él, por lo que deberá ocupar el puesto de héroe, con la colaboración de la reportera estrella Roxanne Ritchi, para salvar a la ciudad de Metrocity.

Nos encontramos ante un largometraje en el que la estética está muy cuidada con gran colorido, pero sin saturar. El movimiento que se les inflige a los personajes y la personalidad de cada uno hace que se conviertan en entrañables e incluso llegan a emocionar al espectador. El apoyo de la tecnología 3D, así como la banda sonora (la mayoría canciones de AC/DC, Michael Jackson y The Clash) permiten animar las secuencias más pobres.

La historia de Megamind se construye teniendo como referente a Superman, el superhéroe por excelencia, y seguramente los fans de los superhéroes encuentren muchas más referencias a las películas de las advertida por una servidora. A pesar de esto, los guionistas han querido dar la vuelta a los habituales clichés de las películas héroe-villano haciendo un guiño a todos esos seguidores.

El doblaje en versión original incluye nombres tan conocidos como Brad Pitt, Ben Stiller o Hill Ferrell, aunque el doblaje español está muy logrado de la mano de Luís Posadas como Megamind, voz habitual de Jonnhy Deep, Jim Carrey o Leonardo di Caprio o Daniel García como Metroman, doblaje de Brad Pitt o Ewan McGregor. Los guionistas han conseguido mezclar todos estos ingredientes dando como resultado una simpática comedia que funciona tanto como parodia, desde un humor sano, como homenaje.

                                                                                    Gala

Para visualizar la ficha técnica de la película puedes entrar en el siguiente enlace: http://www.filmaffinity.com/es/film632453.html

                                                                                                                                   

CINE DRAMÁTICO

Syriana: El oscuro y complejo mundo del mercado del petróleo 

 Syriana, dirigida por Stephen Gaghan, guionista de Traffic, quiere reflejar el interesado e hipócrita mundo comercial del petróleo donde todo vale para obtener la mejor posición en el mercado.  La historia, que se desarrolla en un país petrolero del golfo pérsico, arranca con la venta del traspaso de explotación de los yacimientos –que hasta entonces habían pertenecido a  Connex, un gigante estadounidense con sede en Texas- a una empresa china. El trato lo cierra el príncipe Nasir (Alexander Siddig). Otra empresa menor, llamada Killin se hace al mismo tiempo con la gestión de los yacimientos en Kazajistán. Connex se ve obligada a reaccionar ante los movimientos del mercado y se fusiona con Killin. 

 

Aquí empieza la cadena de despropósitos e irregularidades que van sucediéndose durante la trama. En primer lugar, la fusión presenta irregularidades legales y financieras que cuentan con el beneplácito del gobierno estadounidense que en vez de actúar mira para otro lado. Continúa con la cacicada de la CIA, que asesina al príncipe Nasir porque supone una amenaza a los intereses comerciales del país y puede entorpecer las operaciones comerciales con Connex y Killin.  Sin embargo, su hermano, el príncipe Meshal (Akbar Kurtha) más favorable a los intereses 'yankees', es el elegido por el emir para heredar la corona.

En todo este entramado aparecen una serie de personajes que sufren las consecuencias del complejo y oscuro entramado del comercio petrolífero. Un sistema que deja víctimas: el experimentado y leal agente de la CIA Bob Barnes (George Clooney, --que obtuvo el premio a mejor actor de reparto--) al que su organización utiliza como chivo expiatorio, el asesor financiero del Príncipe Nasir, Bryan Woodman (Matt Damon) que tiene que ver como pierde a su hijo mayor en un accidente y como asesinan a su cliente.

También hay otras víctimas olvidadas como a los trabajadores inmigrantes de los campos petrolíferos, que son explotados como mano de obra barata y prescindible. Tal es el caso del joven Pakistaní que, con la llegada de los compradores chinos, se queda sin trabajo y sin esperanzas de futuro y acaba atrapado en las redes de una célula terrorista islamista donde encuentra sentido a su vida y le convencen para inmolarse contra aquellos que le han robado su dignidad.

Syriana hace que el espectador reflexione sobre la enorme influencia del petróleo en la vida económica y política actual y el oscuro entramado de relaciones comerciales que desencadena su comercialización. También parece lanzar una dura crítica al gobierno americano y a algunas de sus instituciones como la CIA y la Justicia por permitir abusos de poder como el preparar el asesinato de un príncipe para quitarse de enmedio a un elemento que hace peligrar el sistema establecido. 

                                                        

Alberto F.

                            Ficha técnica, sinopsis y críticas de la película